sábado, 6 de septiembre de 2008

Más discreción


Sir Cliff Richard ha tenido siempre un aspecto juvenil y angelical; lo tenía cuando era un ídolo para los jóvenes de los 60 y lo sigue conservando misteriosamente, a sus 67 años, cuando sigue siendo ídolo para los maduros, sobre todo maduras, fans que sobreviven.

Cliff es además muy cristiano y dedica parte de su considerable fortuna a hacer obras de caridad, lo que está muy requetebién y deberían copiar otras estrellas menos generosas.

Cliff es muy pudoroso, lo que le ha llevado a no decir nada sobre su vida privada y sobre su extraña tendencia a no tener compañía, especialmente femenina. Esto ya daba que hablar en los 60, cuando se comparaba su conducta con la de otros tumultuosos cantantes y algunos se decían ¿no será…?

Cliff el cursiEn aquellos oscuros años era mejor no decir nada, por supuesto, no sea que a uno lo fueran a acusar de delitos inconfesables y perdiera fama, fortuna y fans. Pero los años pasaron, las ideas y las leyes cambiaron, las estrellas de otrora maduraron y se eclipsaron… Sólo Sir Cliff mantuvo su aspecto, su beatífica sonrisa y su discreción… hasta que, de pronto, y con peligro de producir infartos a sus hoy cascados fans, publica un libro en el que confiesa que ¡vive con un hombre!

¡Párense ahí los malos pensamientos! El compañero de Cliff es un ex sacerdote católico que colabora con él en todas sus buenas obras, que vive en su casa y con el que se entiende bien ¡nada más! ¿Casarse? No es necesario para la felicidad, además ¿con quién? Cliff confiesa con toda franqueza que aún puede llegar “alguien” que le haga cambiar de opinión…Después de todo en el pasado estuvo a punto de casarse en dos ocasiones con mujeres, a las que desgraciadamente “no quería tanto como hubiera debido”… ¡Ay! ¡Las fans pueden seguir pensando que a lo mejor un día se fija en una de ellas!